Por qué las críticas son mejor señal que los elogios
Las empresas exitosas invierten en escuchar a sus clientes más críticos, no a los que las felicitan. En tu vida personal funciona igual: cuando alguien deja de señalar tus errores, probablemente ya perdió el interés en que mejores. Descubre por qué las críticas son señal de atención y cómo distinguir entre feedback constructivo y tóxico

Cuando la gente deje de criticarte, es porque has perdido su atención.
Tener éxito en tu vida personal y profesional no es muy diferente al éxito de una empresa. Normalmente las empresas que se han mantenido creciendo a lo largo de los años, lo hacen porque saben que necesitan invertir mucho tiempo y dinero en mejora continua.
Es algo que muy seguramente tú no haces porque prefieres gastar tu tiempo y dinero en alcohol y fiestas los fines de semana.
Y uno de los sistemas más efectivos que tienen es el del feedback. Escuchar a los clientes que más se quejan puede ser la clave para mejorar. Y no a los que felicitan. Y así mismo pasa en tu vida personal.
Si no, terminarás como Kodak que ignoró la necesidad de los usuarios por el mundo digital, Blockbuster que creyó que nadie se cansaría de ir a una tienda, o Nokia que pensó que los usuarios no se aburrirían de jugar la culebrita.
Digamos que una empresa o persona que solo recibe felicitaciones podría estar perdiendo la atención de los demás ya que no se molestan en dar críticas que ayuden a mejorar.
Es como cuando vas a un lugar por primera y única vez, y puede estar hecho un caos pero como será algo pasajero, no te molestas en reclamar ni mucho menos en dar un feedback.
Por eso, es importante estar abierto a las críticas más fuertes y humillantes, para que tu crush no pierda el interés en ti y en lugar de enojarte aprende a discernir qué críticas son constructivas y cuáles son tóxicas.

Jesus Eusse
Ingeniero apasionado por la tecnología y desarrollo personal